jueves, 11 de noviembre de 2010

MIGUEL HERNANDEZ " VALS DE LOS ENAMORADOS" ESPAÑA




 VALS DE LOS ENAMORADOS Y UNIDOS HASTA SIEMPRE



No salieron jamás

del vergel del abrazo.

Y ante el rojo rosal

de los besos rodaron.



Huracanes quisieron

con rencor separarlos.

Y las hachas tajantes

y los rígidos rayos.



Aumentaron la tierra

de las pálidas manos.

Precipicios midieron,

por el viento impulsados

entre bocas deshechas.

Recorrieron naufragios,

cada vez más profundos

en sus cuerpos sus brazos.



Perseguidos, hundidos

por un gran desamparo

de recuerdos y lunas

de noviembres y marzos,

aventados se vieron

como polvo liviano:

aventados se vieron,

pero siempre abrazados.

*
*
VIENTOS DEL PUEBLO ME LLEVAN



Vientos del pueblo me llevan,

vientos del pueblo me arrastran,

me esparcen el corazón

y me aventan la garganta.



Los bueyes doblan la frente,

impotentemente mansa,

delante de los castigos:

los leones la levantan

y al mismo tiempo castigan

con su clamorosa zarpa.



No soy un de pueblo de bueyes,

que soy de un pueblo que embargan

yacimientos de leones,

desfiladeros de águilas

y cordilleras de toros

con el orgullo en el asta.

Nunca medraron los bueyes

en los páramos de España.



¿Quién habló de echar un yugo

sobre el cuello de esta raza?

¿Quién ha puesto al huracán

jamás ni yugos ni trabas,

ni quién al rayo detuvo

prisionero en una jaula?



Asturianos de braveza,

vascos de piedra blindada,

valencianos de alegría

y castellanos de alma,

labrados como la tierra

y airosos como las alas;

andaluces de relámpagos,

nacidos entre guitarras

y forjados en los yunques

torrenciales de las lágrimas;

extremeños de centeno,

gallegos de lluvia y calma,

catalanes de firmeza,

aragoneses de casta,

murcianos de dinamita

frutalmente propagada,

leoneses, navarros, dueños

del hambre, el sudor y el hacha,

reyes de la minería,

señores de la labranza,

hombres que entre las raíces,

como raíces gallardas,

vais de la vida a la muerte,

vais de la nada a la nada:

yugos os quieren poner

gentes de la hierba mala,

yugos que habéis de dejar

rotos sobre sus espaldas.



Crepúsculo de los bueyes

está despuntando el alba.



Los bueyes mueren vestidos

de humildad y olor de cuadra;

las águilas, los leones

y los toros de arrogancia,

y detrás de ellos, el cielo

ni se enturbia ni se acaba.

La agonía de los bueyes

tiene pequeña la cara,

la del animal varón

toda la creación agranda.



Si me muero, que me muera

con la cabeza muy alta.

Muerto y veinte veces muerto,

la boca contra la grama,

tendré apretados los dientes

y decidida la barba.



Cantando espero a la muerte,

que hay ruiseñores que cantan

encima de los fusiles

y en medio de las batallas
*
*

martes, 28 de septiembre de 2010

GABRIELA MISTRAL NUESTRA GRAN POETA DE AMERICA "CREDO" CHILE






CREDO


Creo en mi corazón, ramo de aromas



que mi Señor como una fronda agita,



perfumando de amor toda la vida



y haciéndola bendita.







Creo en mi corazón, el que no pide



nada porque es capaz del sumo ensueño



y abraza en el ensueño lo creado:



¡inmenso dueño!







Creo en mi corazón, que cuando canta



hunde en el Dios profundo el flanco herido,



para subir de la piscina viva



recién nacido.







Creo en mi corazón, el que tremola



porque lo hizo el que turbó los mares,



y en el que da la Vida orquestaciones



como de pleamares.







Creo en mi corazón, el que yo exprimo



para teñir el lienzo de la vida



de rojez o palor, y que le ha hecho



veste encendida.







Creo en mi corazón, el que en la siembra



por el surco sin fin fue acrecentado.



Creo en mi corazón siempre vertido



pero nunca vaciado.







Creo en mi corazón en que el gusano



no ha de morder, pues mellará a la muerte;



creo en mi corazón, el reclinado



en-el pecho de Dios terrible y fuerte.

domingo, 5 de julio de 2009

LEONEL O'KUINGTTONS _ CHILE


EL VIAJE

Me duele no haberte amado más

Mi corazón ya ha sido desguazado,como los viejos balandros del Sur,

que se dejan un día en los muelles,pasajeros del olvido.

Y ya nadie viene a preguntar

por el brote de afán que desarrollaron

las manos en una búsqueda

ciega y fija.

La incertidumbre se descolora,

y vuelve de un viaje inquietante,

la esperanza.


EL PINZON

Aparecía veces el pinzón en las manos de las ramas,

y el viento que hacía sufrir los postigos,

recordaba otras regiones

Eran los días del agua,cuando llegaba la tarde

con un gemido puro,y una oveja lenta y una flor salvaje

El techo ha tomado un mirar medieval,

del silencio que respira y exuda

y gravitaba un vocerío de cigueñas lejanas,

o más bien su recuerdo por las piezas de sombra

Hoy no se dónde pudo quedar

el palaque enterraba los restos del otoño ,

ni el damasco que sacudíapara dulcificar tu rostro

Ni la ceniza que dejaba el vuelo del arrendajo

Ni la cerradura quebrada del olvido.

Y las recolectoras que llevan las manzanas jovenes,

hacen desperezarse al aburrido invierno

En el patio grande, callado y algo triste,

aparecía a veces el pinzón

en las manos

el viento mecía los postigos grises

recordando otras regiones.
* Del Libro "En los ciruelos está el Cielo" - Premio Alerce

lunes, 22 de junio de 2009

PIEDRA DE SOL / OCTAVIO PAZ


Piedra de Sol

La treizième revient...c'est encor la première;et c'est toujours la seule-ou c'est le seul moment;car es-tu reine, ô toi, la première ou dernière?es-tu roi, toi le seul ou le dernier amant?Gérard de Nerval (Arthémis)

Un sauce de cristal, un chopo de agua,un alto surtidor que el viento arquea,un árbol bien plantado mas danzante,un caminar de río que se curva,avanza, retrocede, da un rodeo
y llega siempre:un caminar tranquilo
de estrella o primavera sin premura,agua que con los párpados cerrados
mana toda la noche profecías,unánime presencia en oleaje,
ola tras ola hasta cubrirlo todo,verde soberanía sin ocaso
como el deslumbramiento de las alas
cuando se abren en mitad del cielo,
un caminar entre las espesuras de los días futuros y el aciagofulgor de la desdicha como un avepetrificando el bosque con su cantoy las felicidades inminentesentre las ramas que se desvanecen,horas de luz que pican ya los pájaros,presagios que se escapan de la mano,
una presencia como un canto súbito,como el viento cantando en el incendio,una mirada que sostiene en viloal mundo con sus mares y sus montes,cuerpo de luz filtrado por un ágata,piernas de luz, vientre de luz, bahías,roca solar, cuerpo color de nube,color de día rápido que salta,la hora centellea y tiene cuerpo,el mundo ya es visible por tu cuerpo,es transparente por tu transparencia,
voy entre galerías de sonidos,fluyo entre las presencias resonantes,voy por las transparencias como un ciego,un reflejo me borra, nazco en otro,oh bosque de pilares encantados,bajo los arcos de la luz penetrolos corredores de un otoño diáfano,
voy por tu cuerpo como por el mundo,tu vientre es una plaza soleada,tus pechos dos iglesias donde oficiala sangre sus misterios paralelos,mis miradas te cubren como yedra,eres una ciudad que el mar asedia,una muralla que la luz divideen dos mitades de color durazno,un paraje de sal, rocas y pájarosbajo la ley del mediodía absorto,
vestida del color de mis deseoscomo mi pensamiento vas desnuda,voy por tus ojos como por el agua,los tigres beben sueño de esos ojos,el colibrí se quema en esas llamas,voy por tu frente como por la luna,como la nube por tu pensamiento,voy por tu vientre como por tus sueños,
tu falda de maíz ondula y canta,tu falda de cristal, tu falda de agua,tus labios, tus cabellos, tus miradas,toda la noche llueves, todo el día

abres mi pecho con tus dedos de agua,cierras mis ojos con tu boca de agua,sobre mis huesos llueves, en mi pecho

hunde raíces de agua un árbol líquido,
voy por tu talle como por un río,voy por tu cuerpo como por un bosque,como por un sendero en la montaña

que en un abismo brusco se termina

voy por tus pensamientos afilados

y a la salida de tu blanca frente

mi sombra despeñada se destroza,recojo mis fragmentos uno a uno

y prosigo sin cuerpo, busco a tientas,
corredores sin fin de la memoria,puertas abiertas a un salón vacío

donde se pudren todos lo veranos,las joyas de la sed arden al fondo,rostro desvanecido al recordarlo,mano que se deshace si la toco,cabelleras de arañas en tumulto

sobre sonrisas de hace muchos años,
a la salida de mi frente busco,busco sin encontrar, busco un instante,un rostro de relámpago y tormenta

corriendo entre los árboles nocturnos,rostro de lluvia en un jardín a obscuras,agua tenaz que fluye a mi costado,
busco sin encontrar, escribo a solas,no hay nadie, cae el día, cae el año,caigo en el instante, caigo al fondo,invisible camino sobre espejos

que repiten mi imagen destrozada,piso días, instantes caminados,piso los pensamientos de mi sombra,piso mi sombra en busca de un instante,
busco una fecha viva como un pájaro,busco el sol de las cinco de la tardetemplado por los muros de tezontle:la hora maduraba sus racimos

y al abrirse salían las muchachas

de su entraña rosada y se esparcían

por los patios de piedra del colegio,alta como el otoño caminaba

envuelta por la luz bajo la arcaday el espacio al ceñirla la vestíade un piel más dorada y transparente,
tigre color de luz, pardo venado

por los alrededores de la noche,entrevista muchacha reclinada

en los balcones verdes de la lluvia,adolescente rostro innumerable,he olvidado tu nombre, Melusina,Laura, Isabel, Perséfona, María,tienes todos los rostros y ninguno,eres todas las horas y ninguna,te pareces al árbol y a la nube,eres todos los pájaros y un astro,te pareces al filo de la espaday a la copa de sangre del verdugo,yedra ue avanza, envuelve y desarraigaal alma y la divide de sí misma, escritura de fuego sobre el jade,grieta en la roca, reina de serpientes,columna de vapor, fuente en la peña,

circo lunar, peñasco de las águilas,grano de anís, espina diminuta

y mortal que da penas inmortales,

pastora de los valles submarinos

y guardiana del valle de los muertos,liana que cuelga del cantil del vértigo,enredadera, planta venenosa,

flor de resurrección, uva de vida,señora de la flauta y del relámpago,terraza del jazmín, sal en la herida,ramo de rosas para el fusilado,nieve en agosto, luna del patíbulo,escritura del mar sobre el basalto,escritura del viento en el desierto,testamento del sol, granada, espiga,
rostro de llamas, rostro devorado,adolescente rostro perseguido

años fantasmas, días circulares

que dan al mismo patio, al mismo muro,arde el instante y son un solo rostrolos sucesivos rostros de la llama,todos los nombres son un solo nombre

todos los rostros son un solo rostro,todos los siglos son un solo instante

y por todos los siglos de los siglos

cierra el paso al futuro un par de ojos,
no hay nada frente a mí, sólo un instante

rescatado esta noche, contra un sueño

de ayuntadas imágenes soñado,duramente esculpido contra el sueño,arrancado a la nada de esta noche,a pulso levantado letra a letra,mientras afuera el tiempo se desboca

y golpea las puertas de mi alma

el mundo con su horario carnicero,
sólo un instante mientras las ciudades,los nombres, lo sabores, lo vivido,se desmoronan en mi frente ciega,mientras la pesadumbre de la noche

mi pensamiento humilla y mi esqueleto,y mi sangre camina más despacio

y mis dientes se aflojan y mis ojos

se nublan y los días y los añossus horrores vacíos acumulan,
mientras el tiempo cierra su abanico

y no hay nada detrás de sus imágenes

el instante se abisma y sobrenada

rodeado de muerte,

la noche y su lúgubre bostezo,amenazado por la algarabía

de la muerte vivaz y

al instante se abisma y se penetra,como un puño se cierra, como un fruto

que madura hacia dentro de sí mismo

y a sí mismo se bebe y se derrama

el instante translúcido se cierra

Melussina con tos y mala vista, barajando

viejas fotos:

no hay nadie, no eres nadie,un montón de ceniza y una escoba,un cuchillo mellado y un plumero,un pellejo colgado de unos huesos,un racimo ya seco, un hoyo negroy en el fondo del hoyo los dos ojosde una niña ahogada hace mil años,
miradas enterradas en un pozo,miradas que nos ven desde el principio,mirada niña de la madre viejaque ve en el hijo grande un padre joven,mirada madre de la niña solaque ve en el padre grande un hijo niño,miradas que nos miran desde el fondode la vida y son trampas de la muerte

¿o es al revés: caer en esos ojoses volver a la vida verdadera?,
¡caer, volver, soñarme y que me sueñeno

tros ojos futuros, otra vida,otras nubes, morirme de otra muerte!esta noche me basta, y este instanteque no acaba de abrirse y revelarme

dónde estuve, quién fui, cómo te llamas,cómo me llamo yo:¿hacía

el verano? y todos los veranos?en Christopher Street, hace diez años,con Filis que tenía dos hoyuelos

donde bebían luz los gorriones?,¿por la Reforma Carmen me decía"no pesa el aire, aquí siempre es octubre",o se lo dijo a otro que he perdido

o yo lo invento y nadie me lo ha dicho?,¿caminé por la noche de Oaxaca,inmensa y verdinegra como un árbol,hablando solo como el viento locoy al llegar a mi cuarto ?siempre un cuarto?no me reconocieron los espejos?,¿desde el hotel Vernet vimos al amanecer

con los castaños ? "ya es muy tarde"decías al peinarte y yo

en la pared, sin decir nada?,

¿subimos juntos a la torre, vimos

caer la tarde desde el arrecife?¿comimos uvas en Bidart?,

¿compramos

gardenias en Perote?,

nombres, sitios,calles y calles, rostros, plazas, calles,estaciones, un parque, cuartos solos,manchas en la pared, alguien se peina,alguien canta a mi lado, alguien se viste,cuartos, lugares, calles, nombres, cuartos,

Madrid, 1937,en la Plaza del Ángel mujeres cosian

y cantaban con sus hijos,después sonó la alarma y hubo gritos,casas arrodilladas en el polvo,torres hendidas, frentes esculpidasy el huracán de los motores, fijo:

dos se desnudaron y se amaronpor defender nuestra porción eterna,nuestra ración de tiempo y paraíso,tocar nuestra raíz y recobrarnos,recobrar nuestra herencia

ladrones de vida hace mil siglos,los dos se desnudaron y besaronporque las desnudeces enlazadassaltan el tiempo y son invulnerables,nada las toca, vuelven al principio,no hay tú ni yo, mañana, ayer ni nombres,verdad de dos en sólo un cuerpo y alma,oh ser total...cuartos a la derivaentre ciudades que se van a pique,cuartos y calles, nombres como heridas,el cuarto con ventanas a otros cuartoscon el mismo papel

un hombre en camisa lee el periódico

o plancha una mujer; el cuarto claroque visitan las ramas de un durazno;

otro cuarto: afuera siempre llueve

y hay un patio y tres niños oxidados;cuartos que son navíos que se mecenen un golfo de luz; o submarinos:el silencio se esparce en olas verdes,todo lo que tocamos fosforece;mausoleos de lujo, ya roídos

los retratos, raídos los tapetes;trampas, celdas, cavernas encantadas,pajareras y cuartos numerados,todos se transfiguran, todos vuelan,cada moldura es nube, cada puertada al mar, al campo, al aire, cada mesaes un festín; cerrados como conchasel tiempo inútilmente los asedia,no hay tiempo ya, ni muro: ¡espacio, espacio,abre la mano, coge esta riqueza,corta los frutos, come de la vida,tiéndete al pie del árbol, bebe el agua!,
todo se transfigura y es sagrado,es el centro del mundo cada cuarto,es la primera noche, el primer día,el mundo nace cuando dos se besan,

de luz de entrañas transparentesel cuarto como un fruto se entreabreo estalla como un astro

las leyes comidas de ratones,las rejas de los bancos y las cárceles,las rejas de papel, las alambradas,

timbres y las púas y los pinchos,el sermón monocorde de las armas,el escorpión meloso y con bonete,el tigre con chistera, presidentedel Club Vegetariano y la Cruz Roja,el burro pedagogo, el

a redentor, padre de pueblos,el Jefe, el tiburón, el arquitecto

del porvenir, el cerdo uniformado,el hijo predilecto de la Iglesia

que se lava la negra dentaduracon el agua bendita y toma clasesde inglés y democracia, las paredes

invisibles, las máscaras podridasque dividen al hombre de los hombres,al hombre de sí mismo,se derrumbanpor un instante inmenso y vislumbramos

nuestra unidad perdida, el desamparoque es ser hombres, la gloria que es ser hombres

y compartir el pan, el sol, la muerte,el olvidado asombro de estar vivos;
amar es combatir, si dos se besan

el mundo cambia, encarnan los deseos,el pensamiento encarna, brotan las alasen las espaldas del esclavo, el mundoes real y tangible, el vino es vino,el pan vuelve a saber, el agua es agua,amar es combatir, es abrir puertas,

dejar de ser fantasma con un númeroa perpetua cadena

un amo sin rostro;el mundo cambiasi dos se miran y se reconocen,amar es desnudarse de los nombres:"déjame ser tu puta", son palabras

de Eloísa, mas él cedió a las leyes,la tomó por esposa y como premiolo castraron después;mejor el crimen,los amantes suicidas, el incesto

de los hermanos como dos espejos

enamorados de su semejanza,mejor comer el pan envenenado,el adulterio en lechos de ceniza,los amores feroces, el delirio,su yedra ponzoñosa, el sodomita

que lleva por clavel en la solapa

un gargajo, mejor ser lapidado

en las plazas que dar vuelta a la noria

que exprime la substancia de la vida,cambia la eternidad en horas huecas,los minutos en cárceles, el tiempo

en monedas de cobre y mierda abstracta;
mejor la castidad, flor invisible

que se mece en los tallos del silencio,el difícil diamante de los santos

que filtra los deseos, sacia al tiempo,

nupcias de la quietud y el movimiento,canta la soledad en su corola,pétalo de cristal en cada hora,el mundo se despoja de sus máscaras

y en su centro, vibrante transparencia,lo que llamamos Dios, el ser sin nombre,se contempla en la nada, el ser sin rostro

emerge de sí mismo, sol de soles,plenitud de presencias y de nombres;
sigo mi desvarío, cuartos, calles,camino a tientas por los corredores

del tiempo y subo y bajo sus peldaños

y sus paredes palpo y no me muevo,vuelvo donde empecé, busco tu rostro,camino por las calles de mí mismobajo un sol sin edad, y tú a mi ladocaminas como un árbol, como un río

caminas y me hablas como un río,creces como una espiga entre mis manos,lates como una ardilla entre mis manos,vuelas como mil pájaros, tu risa

me ha cubierto de espumas, tu cabezaes un astro pequeño entre mis manos,el mundo reverdece si sonríescomiendo una naranja,el mundo cambia

si dos, vertiginosos y enlazados,caen sobre las yerba: el cielo baja,los árboles ascienden, el espaciosólo es luz y silencio, sólo espacio

abierto para el águila del ojo,pasa la blanca tribu de las nubes,rompe amarras el cuerpo, zarpa el alma,perdemos nuestros nombres y flotamos

a la deriva entre el azul y el verde,tiempo total donde no pasa nada

sino su propio transcurrir dichoso,
no pasa nada, callas, parpadeas(silencio: cruzó un ángel este instante

grande como la vida de cien soles),

¿no pasa nada, sólo un parpadeo?

y el festín, el destierro, el primer crimen,la quijada del asno, el ruido opacoy la mirada incrédula del muerto

al caer en el llano ceniciento,Agamenón y su mugido inmensoy el repetido grito de Casandramás fuerte que los gritos de las olas,Sócrates en cadenas" (el sol nace,morir es despertar: "Critón, un gallo

a Esculapio, ya sano de la vida"),

el chacal que diserta entre las

Nínive, la sombra que vio Bruto

antes de la batalla, Moctezuma

en el lecho de espinas de su insomnio,

viaje en la carretera hacia la muerte?

el viaje interminable mas contado

por Robespierre minuto tras minuto,la mandíbula rota entre las manos?

,Churruca en su barrica como un trono

escarlata, los pasos ya contadosde Lincoln al salir hacia el teatro,el estertor de Trotsky y sus quejidosde jabalí, Madero y su mirada

que nadie contestó: ¿por qué me matan?,los carajos, los ayes, los silenciosdel criminal, el santo, el pobre diablo,cementerio de frases y de anécdotas

que los perros retóricos escarban,el delirio, el relincho, el ruido obscuroque hacemos al morir y ese jadeoque la vida que nace y el sonidode huesos machacados en la riña

y la boca de espuma del profeta

y su grito y el grito del verdugoy el grito de la víctima...

son llamas

los ojos y son llamas lo que miran,llama la oreja y el sonido llama,brasa los labios y tizón la lengua,el tacto y lo que toca, el pensamientoy lo pensado, llama el que lo piensa,todo se quema, el universo es llama,

arde la misma nada que no es

un pensar en llamas, al fin humo:no hay verdugo ni víctima...¿y el grito en

la tarde del viernes?, y el silencioque se cubre de signos, el silencio

que dice sin decir, ¿no dice nada?,¿no son nada los gritos de los hombres?,

¿no pasa nada cuando pasa el tiempo?
no pasa nada, sólo un parpadeo

del sol, un movimiento apenas, nada,no hay redención, no vuelve atrás el tiempo,los muerto están fijos en su muerte

y no pueden morirse de otra muerte,intocables, clavados en su gesto,desde su soledad, desde su

remedio nos miran sin mirarnos,su muerte ya es la estatua de su vida,un siempre estar ya nada para siempre,

cada minuto es nada para siempre,un rey fantasma rige sus latidosy tu gesto final, tu dura máscaralabra sobre tu rostro cambiante:el monumento somos de una vida

ajena y no vivida, apenas nuestra,
¿la vida, cuándo fue de veras nuestra?,

¿cuando somos de veras lo que somos?,bien mirado no somos, nunca somos

a solas sino vértigo y vacío,muecas en el espejo, horror y vómito,

nunca la vida es nuestra, es de los otros,la vida no es de nadie, todos somos

la vida ?

pan de sol para los otros,los otros todos que nosotros somos?,soy otro cuando soy, los actos míosson más míos si son también de todos,para que pueda ser he de ser otro,

salir de mí, buscarme entre los otros,los otros que no son si yo no existo,los otros que me dan plena existencia,no soy, no hay yo, siempre somos nosotros,

la vida es otra, siempre allá, más lejos,

fuera de ti, de mí, siempre horizonte,vida que nos desvive y enajena,que nos inventa un rostro y lo desgasta,hambre de ser, oh muerte, pan de todos,
Eloísa, Perséfona, María,muestra tu rostro al fin para que vea

mi cara verdadera, la del otro,mi cara de nosotros siempre todos,cara de árbol y de panadero,de chofer y de nube y de marino,cara de sol y arroyo y Pedro y Pablo,cara de solitario colectivo,despiértame, ya nazco:vida y muerte

pactan en ti, señora de la noche,torre de claridad, reina del alba,virgen lunar, madre del agua madre,cuerpo del mundo, casa de la muerte,caigo sin fin desde mi nacimiento,caigo en mí mismo sin tocar mi fondo,recógeme en tus ojos, junta el polvo

disperso y reconcilia mis cenizas,ata mis huesos divididos, soplasobre mi ser, entiérrame en tu tierra,tu silencio dé paz al pensamiento

contra sí mismo airado;abre la mano,señora de semillas que son días,el día es inmortal, asciende, crece,acaba de nacer y nunca acaba,cada día es nacer, un nacimientoes cada amanecer y yo amanezco,amanecemos todos, amanece

el sol cara de sol, Juan amanececon su cara de Juan cara de todos,
puerta del ser, despiértame, amanece,déjame ver el rostro de este día,déjame ver el rostro de esta noche,todo se comunica y transfigura,arco de sangre, puente de latidos,llévame al otro lado de esta noche,adonde yo soy tú somos nosotros,al reino de pronombres enlazados,
puerta del ser: abre tu ser, despierta,aprende a ser también, labra tu cara,trabaja tus facciones, ten un rostro

para mirar mi rostro y que te mire,para mirar la vida hasta la muerte,rostro de mar, de pan, de roca y fuente,manantial que disuelve nuestros rostrosen el rostro sin nombre, el ser sin rostro,indecible presencia de presencias . . .
quiero seguir, ir más allá, y no puedo:se despeñó el instante en otro y otro,dormí sueños de piedra que no sueña

y al cabo de los años como piedras

oí cantar mi sangre encarcelada,con un rumor de luz el mar cantaba,una a una cedían las murallas,todas las puertas se desmoronaban

y el sol entraba a saco por mi frente,despegaba mis párpados cerrados,desprendía mi ser de su envoltura,me arrancaba de mí, me separabade mi bruto dormir siglos de piedray su magia de espejos revivía

un sauce de cristal, un chopo de agua,un alto surtidor que el viento arquea,un árbol bien plantado mas danzante,un caminar de río que se curva,avanza, retrocede, da un rodeoy llega siempre:
México, 1957

jueves, 28 de mayo de 2009

ELEGIA A MI HERMANO/JOSE DGO. GOMEZ ROJAS

De pronto una gran sombra por la sombra se advierte.
Todos quedamos mudos a la invisible suerte.
Temblando, por las sombras, quedo una sombra fuerte
y todos sollozamos presintiendo a la muerte.
La carne de mi hermano tembló como aterida.
Mi madre quebrantada, sollozó estremecida.
Fue un momento indecible de súplica a la vida.
¡Juventud de mi hermano para siempre dormida!
Salí al jardín.
La fuente por siempre estaba muda.
Con un dolor enorme mi garganta se anuda.
Después lloré... lloré...
Sólo sé que en mi duda
temblaba por los cielos una estrella desnuda.
La noche se clavó por los cielos lejanos.

Dios tembló en los rosarios y tembló por las manos.
Un divino presagio retumbó en los arcanos
y se transfiguraron los destinos humanos.
Con mi alma toda en pena salí del aposento.
Sobre mi corazón gravitó aquel momento
como una eternidad.
En decir lo inefable pongo en vano mi intento.
El cielo era un inmenso árbol azul florido,
la eternidad pasaba con sus alas de olvido.
La emoción de los tiempos transminó mis sentido.
¡Quede solo en la tierra frente al cielo dormido!

miércoles, 27 de mayo de 2009

ALMA AUSENTE /FEDERICO GARCIA LORCA


No te conoce el toro ni la higuera,

ni caballos ni hormigas de tu casa.
No te conoce tu recuerdo mudo
porque te has muerto para siempre.
No te conoce el lomo de la piedra,

ni el raso negro donde te destrozas.
No te conoce tu recuerdo mudo
porque
te has muerto para siempre.
El otoño vendrá con caracolas,uva de niebla y montes agrupados,

pero nadie querrá mirar tus ojos
porque te has muerto para siempre.
Porque te has muerto para siempre,como todos los muertos de la Tierra,como todos los muertos que se olvidan

en un montón de perros apagados.
No te conoce nadie.No.
Pero yo te canto.
Yo canto para luego tu perfil y tu gracia.
La madurez insigne de tu conocimiento.
Tu apetencia de muerte y el gusto de su boca.
La tristeza que tuvo tu valiente alegría.
Tardará mucho tiempo en nacer, si es que nace,
un andaluz tan claro, tan rico de aventura.
Yo canto su elegancia con palabras que gimen
y recuerdo una brisa triste por los olivos.

viernes, 22 de mayo de 2009





JAMAS




Manuel Magallanes Moure




Ante nosotros las olas


corren, corren sin cesar,como si algo persiguieran


sin alcanzarlo jamás.
Dice la esposa: ¿No es cierto


que nunca habrás de tornar


junto a esa mujer lejana?


Y yo contesto: ¡Jamás!
Ella pregunta:


¿No es ciertoque ya nunca volverás


a celebrar su hermosura?


Y yo contesto: ¡Jamás!
Ella interroga: ¿No es cierto


que nunca habrás de soñar


con sus fatales caricias?


Y yo respondo: ¡Jamás!
Las olas, mientras hablamos,corren, corren sin cesar,como si algo persiguieran


sin alcanzarlo jamás.
Dice la esposa: ¿No es cierto


que nunca me has de olvidar


para pensar sólo en ella?


Y yo le digo: ¡Jamás!
Ella pregunta: ¿No es cierto


que ya nunca la amarás


como la amaste hasta ahora?


Y yo contesto: ¡Jamás!
Ella interroga: ¿No es cierto


que su imagen borrarás


de tu mente y de tu alma?


Y yo murmuro: ¡Jamás...!
Los dos callamos. Las olas


corren, corren sin cesar,como si algo persiguieran


sin alcanzarlo jamás.